Bache de hamaca



en el nido del tiempo
la hamaca es el huevo

¿pero quién fue primero
el hombre
o el niño?

el barro comienza por los pies
se amasa en el bache

un eslabón perdido
entre el cielo y la tierra

la erosión del vuelo
es la punta del péndulo

a medida que el barro
corta los dientes
el bache aumenta de tamaño

ahí donde no se hace pie

flota la madera

Este poema fue incluido en la antología Infancias

13 comentarios:

Chelo Candia dijo...

a mi siempre me gustó hamacarme después de un día de mucha lluvia... gracias a estos baches. Llenos de agua, hacen más peligrosa la acción de alcanzar la tabla. Y una vez arriba, sin mojarme ni un poquito las Flecha, el balanceo sobrevolando el charco se hacía mucho más extremo.
Y si lograbas acostarte de panza, podías verte pasar para aquí y para allá, con fondo de cielo y hojas, a modo de sucio espejo.

Silvia Castro dijo...

Chelo, qué lindo! y justo se largó a llover!
Muchos cariños

Silvia

marisa negri dijo...

pararse sobre la madera
doblar las rodillas
entre el cielo y la tierra las hamacas tienden un puente y son nuestra primera experiencia de vuelo

Silvia Castro dijo...

después de la lluvia nos vamos a hamacar, Negri, dale?

Abrazo fuerte

Anónimo dijo...

entonces el tiempo nos guarda un lugar donde seguir siendo niños alborotando el aire...aunque a punto de ser tragados, absorbidos, imantados. gracias sil!!!! -ió: maritza- (los caracteres que me tocaron a verificar fueron: formers. ¡increible!)

Silvia Castro dijo...

dale, Maritza, subite que quedan unas cuantas hamacas libres...

raul dijo...

cuando llovía arrancabas igual que con las empanadas de la abuela poro...

Anónimo dijo...

cuando llovía arrancabas igual que con las empanadas de la poro... carinios fraternos inmensos

Silvia Castro dijo...

Hermano, con vos se puede hablar horas de estas cuestiones...

más cariños inmensos

almagriot dijo...

...y soy un huevo que esta siendo
empollado por el infinito
una casa que es dios
donde se retrata en la fachada
lo indescriptible
lo que no se puede conocer
la mansion de los poderes
es un dibujo en tinta echa de
sangre orina saliva semen sudor menstruo y silencio
esta alquimia secreta a inscrito
en la palma de tu mano
extraños silencios
preñados de fulgor

Silvia Castro dijo...

gracias Daniela y Almagriot por comentar

Anónimo dijo...

excelente!!!
carlos roberto

Silvia Castro dijo...

Gracias, Carlos. Un saludo